Donde Quiera Que Estes
Joan Manuel Serrat
Donde quiera que estés te gustará saber que por flaca que fuese la vereda no mal vendí tu pañuelo de seda por un trozo de pan y que jamás por más cansado que estuviese abandoné tu recuerdo a la orilla del camino y por fría que fuera mi noche triste no eché al fuego ni un sólo de los besos que me diste. Por ti por ti brilló mi sol un día y cuando pienso en tí brilla de nuevo. Sin que lo empañe la melancolía dedos fugaces amores eternos. Donde quiera que estés te gustará saber que te pude olvidar y no he querido y por fría que sea mi noche triste no echo al fuego ni un sólo de los besos que me diste. Donde quiera que estés si te acuerdas de mi. C* -001212-